DE CERO AL MAB: LA HISTORIA DE CLERHP HASTA LLEGAR A CONVERTIRSE EN COTIZADA

martes, 30 de agosto de 2016


Dicen que quien no arriesga no gana, y desde luego que fundar una empresa es uno de los mayores riesgos que se pueden correr en la vida, pero también una de las aventuras más bonitas. En el año 2011, en plena crisis económica y financiera en España, nació Clerhp, una ingeniería especializada en el diseño, cálculo y asistencia técnica para la estructura de todo tipo de edificios.

Muchos podrían pensar que era una locura crear una empresa dedicada al sector de la construcción y la arquitectura cuando la burbuja inmobiliaria acababa de estallar, si bien Clerhp nació con un as debajo de la manga, un valor diferencial que le daría su principal ventaja competitiva. La idea de negocio de la compañía supone una vuelta de tuerca al sector de la ingeniería tradicional al caracterizarse por sus proyectos llave en mano, es decir, Clerhp tiene presencia en toda la cadena de valor, lo que permite depurar todo el proceso y asegurar un crecimiento sostenido.

La otra clave de la empresa para sobrevivir era diversificar su cartera y dar el salto al otro lado del charco, aprovechando que en Latinoamérica está todo por hacer en el sector de la construcción y la ingeniería, ya que se trata de sociedades muy jóvenes que han empezado a generar riqueza hace muy poco y tienen mayores necesidades habitacionales que en España y Europa.

La idea, el concepto y la estrategia eran claros, pero había que encontrar la manera de ponerlos en marcha, es decir, financiación. Y esa es la parte más complicada para una PYME hoy en día. En el caso de Clerhp se empezó poco a poco, con rondas de financiación privadas hasta lograr el apoyo de Business Angel, esa figura que actúa como “padrino” de empresas que están empezando al dotarles no solo de financiación, sino también de asesoramiento, consejo y aliento para seguir adelante. Esa cercanía inversora quedó en el ADN de Clerhp y, desde entonces, se intentó conseguir socios con la misma filosofía.

Aunque también se recurrió a la banca tradicional, el primer gran paso vino cuando conseguimos el apoyo de ENISA, la sociedad pública creada para financiar proyectos empresariales que considera viables y también innovadores. Lograr este apoyo supone un doble refuerzo, porque significa que una entidad dependiente del gobierno considera el proyecto realista y, a la vez, disruptivo, con un componente diferente que le hace destacar sobre el resto. ENISA ya ha concedidos tres créditos participativos a Clerhp y, a día de hoy, es un apoyo clave para el grupo.

El salto al alternativo; un paso natural

Tras haber recorrido ese camino y haber logrado llevar la marca Clerhp a Bolivia y Brasil, hace dos años se abrió una nueva posibilidad: dar el salto al Mercado Alternativo Bursátil (MAB) y convertir a Clerhp en una empresa cotizada. Se trataba de una decisión que podía cambiar el rumbo de los acontecimientos y a la propia empresa, algo que había que meditar muy seriamente, ya que es una de las decisiones más importantes en la historia de una compañía

Y la apuesta de Clerhp fue clara desde el principio. Cotizar en este segmento de la bolsa española dedicado a empresas en expansión era la mejor alternativa para la empresa, ya que actualmente se encuentra inmersa en un proceso de crecimiento y expansión internacional que requiere del apoyo de inversores acostumbrados a tratar con firmas que estén viviendo el mismo proceso que nosotros. Compañías jóvenes que quieren salir de su zona de confort y despegar para llevar su negocio disruptivo a todo el mundo.

Porque no se trata de encontrar solo inversores que aporten capital, se trata de encontrar socios, compañeros de viaje que, además de financiación, aporten experiencia y una nueva visión para que la empresa crezca. Es decir, volver a la filosofía del Business Angel que es vital para las PYMES.

En los meses que Clerhp lleva cotizando, además de lograr financiación –lo que ha permitido el desembarco en Paraguay, entre otros hitos-, la compañía ha conseguido ganar visibilidad, ya que ahora tiene status de cotizada –algo que se valora mucho en los mercados internacionales- y genera un interés público.

Además, cotizar en el mercado aporta otro tipo de valores: transparencia, rigurosidad y claridad en la comunicación con el propio mercado y los inversores. Cotizar en bolsa es una responsabilidad, y como tal hay que cumplir con unas normas que, a la larga, benefician a la propia empresa.

Desde la perspectiva de Clerhp, salir al MAB ha sido una de las mejores decisiones que hemos podido tomar. Saltar a bolsa imprime en una compañía un sello de calidad que de otro modo es muy difícil conseguir. Además, pone a la compañía en órbita, al descubrirla ante los ojos de la comunidad inversora y de su propio sector. Y eso es algo que a día de hoy no tiene precio.

Juan Andrés Romero
Presidente de Clerhp*

*Clerhp Estructuras es una ingeniería especializada en el diseño, cálculo y la asistencia técnica de estructuras de todo tipo de edificios que ofrece servicios llave en mano. Fundada en 2011, uno de los principales valores añadidos de la firma está en el know how de su ingeniería, adquirida gracias al importante crecimiento inmobiliario vivido en España durante los años 90. Si bien este periodo estuvo acompañado de múltiples excesos, Clerhp se ha hecho un nombre propio en el sector al desarrollar un modelo de negocio y financiero que depura todo el proceso. Con presencia en España, Bolivia, Paraguay y Brasil, la expansión internacional es uno de los pilares en su estrategia de crecimiento, siendo su principal objetivo los mercados con alto potencial de crecimiento debido a una estructura poblacional joven. Entre sus cifras destacan 4,7 millones de ingresos en 2015 del grupo, lo que supone una mejora del 34% con respecto al ejercicio anterior. Más información en http://www.clerhp.com