A nadie se le escapa la importancia que tiene para cualquier empresa o proyecto que se digne el tratar de proteger no sólo la marca, sino hasta donde sea posible, la propia imagen e incluso podríamos hablar del prestigio profesional o empresarial.
Hasta este momento, cuando un empresario piensa en lanzar un producto, una empresa o un proyecto particular, se viene pensando en registrar una marca, un nombre comercial y, cada vez más, entra dentro de lo habitual el que hagamos un chequeo previo en la Web para comprobar la disponibilidad del nombre de dominio en Internet. Es más, cada vez se registran más tanto el "punto como" como el "punto es" para asegurarnos que nuestra marca no caerá en terceros ya sean de buena o mala fe.
Desde luego lo anterior es importante. Es, digamos, el punto de partida y lo más básico a la hora de asegurarnos la protección de nuestra marca y nuestra imagen (apunto: desde un punto de vista jurídico, y dejando de lado algunos matices, lo más importante es tener la marca registrada para evitarnos problemas futuros).
Ahora bien, lanzo una reflexión que creo puede tener un alto valor añadido para aquellos que se preocupan de tanto de su identidad en Internet como de la protección de su marca. Esta reflexión en voz alta puede servir, desde mi punto de vista, tanto para profesionales a la hora de aconsejar a sus clientes, como para el propio empresario que conociendo estos canales, ganará tanto en tranquilidad como en presencia.
Se trata de los servicios de la llamada Web 2.0.
Internet es conceptualmente global, y dado el camino que están tomando las cosas, cada vez es más importante la intervención del usuario en la Web: escribiendo comentarios en blogs, subiendo fotos, comentando vídeos, rellenando encuestas, reservando hoteles y billetes de avión, comparando productos y precios y, como no, introduciendo su perfil en redes sociales. Pues bien, para todos estos servicios suelen ocurrir tres cosas: (i) son gratuitos -al menos en sus versiones básicas-; (ii) para participar activamente suele necesitarse de un nombre de usuario y de una clave; y (iii) en muchas de las webs de las llamadas 2.0 cada usuario tiene un perfil asignado al nombre de usuario con el que se ha registrado. El único requisito para introducir un nombre de usuario a la hora de registrarse en un servicio es que ese nombre esté disponible. Nada más.
Por lo tanto, más adelante veremos algunos ejemplos, pero la conclusión es que INTERESA DARSE DE ALTA EN CUANTOS MÁS SERVICIOS WEB 2.0 MEJOR PARA ASEGURARNOS QUE NO SE SUPLANTARÁ NUESTRA IDENTIDAD Y QUE, ADEMÁS, LOS TENDREMOS DISPONIBLES SI ALGUNA VEZ REALMENTE QUEREMOS USARLOS.
Para tratar de explicarlo mejor, creo que lo ideal es verlo sobre algunos ejemplos con los servicios más habituales y representativos:
1) BLOGS.
El lector da por hecho que el blog que ahora está leyendo es de AJE REGIÓN DE MURCIA, pero...¿y si no lo fuera?. En realidad ha bastado con tener una cuenta en Blogger y crear un Blog con un nombre determinado. Empresario, piensa en que mañana puedes ver en la web una nueva página llamada http://elnombredetuempresa.blogspot.com y que bien pueden descalificar tu producto, bien pueden aprovecharse de tu buena imagen para crear confusión. ¿Qué cuesta crear un blog con el nombre de la empresa de forma que, aunque no esté operativo, NADIE MÁS PUEDA REGISTRARLO en adelante? Respuesta: NADA.
2) CUENTAS DE EMAIL.
Es también cada vez más habitual el uso de las cuentas de mail facilitadas por Gmail de Google o el correo de Yahoo. Es más, estas cuentas son cada vez más utilizadas para acceder a ciertas páginas o servicios de las propias compañías. Si tu empresa (no ya la persona física) quiere aprovecharse de las ventajas de este tipo de correo además del corporativo -aunque ahora mismo pueden ser en realidad el mismo ya que una cuenta de Gmail puede operar bajo el nombre de dominio que le indiquemos- ¿por qué no registrar un correo de Gmail, Hotmail o Yahoo con el nombre de la empresa? Amigo mío, intenta registrar el nombre de tu empresa en un correo de Gmail y cuentanos que ocurre. Probablemente YA ESTARÁ COGIDO!. De nuevo lo ideal (y gratuito) es reservarnos también estas cuentas de correo.
3) COLOFÓN FINAL: LAS REDES SOCIALES.
Las redes sociales son el paradigma de la falta de escrupulosidad, en la mayoría de las veces por parte del propio usuario, hacia el respeto por la protección de datos personales o la propia intimidad. No le niego sus virtudes. Al contrario, personalmente tengo usuario en varias de ellas y creo que en un futuro no muy lejano serán uno de los medios principales de contacto entre las personas y las empresas.
Por todo ello, no lo dudes: aunque hoy no quieras usarlas REGISTRA TU USUARIO, tanto personal como de la empresa, ya que te arriesgas a que alguien a quien probablemente no conoces (o sí), lo haga por ti. En ese caso piensa en qué ocurriría cuando un posible cliente buscando información sobre tu empresa en Internet se vea directamente dirigido a una página en Facebook en la que el usuario es tu marca o tu empresa. Esa página no tiene precio para ti, sin embargo, si la registras ahora, será GRATIS.
CONCLUSIÓN: mi opinión es que, si quieres controlar un poco más tu marca o tu identidad en Internet (tampoco se le pueden poner puertas al campo, ojo), no dudes en registrarte en, al menos, los siguientes servicios con el nombre de tu empresa (si lo haces con el tuyo también mejor que mejor):
- Crea una cuenta en Google (te servirá para iGoogle, Google Reader, Blogger, Gmail, y un sin fin de servicios de Google).
- Crea un Blog en Blogger con el nombre de tu empresa (puedes incluso escoger la opción de que no sea visible con lo que ni siquiera aparecerá en las búsquedas, pero al menos te aseguras que nadie más podrá registrarlo).
- Da de alta un usuario en Skype.
- Sepas o no sepas lo que es Twittear (creeme, lo acabarás sabiendo), ábrete un usuario en Twitter. Intenta buscar entre los usuarios de Twitter cualquier marca conocida o nombre de famoso. Verás que ya están ahí.
- Crea un usuario en las dos o tres redes sociales más usadas: Xing, LikedIn y Facebook. Las dos primeras son de tipo más profesional, mientras que la tercera es algo más personal aunque tiene muchísimo tirón y se pueden crear páginas para empresas.
- Esto en realidad no tiene fin, de modo que, al margen de lo anterior hay también otras páginas y servicios que quizás quieras revisar por si te interesa tener usuario o crear contenido con el nombre de tu empresa. Aparecen cientos a diario, pero las que listamos a continuación son de las ya consolidadadas (si es que se puede decir eso en Internet): Flickr, MySpace, YouTube, Slide-Share, LastFM, Wikipedia, Delicious, ...
DISCLAIMER: tus datos son tuyos. Esta entrada no es una apología de "expón tus datos libremente en Internet", ni mucho menos. Lo que quiero únicamente decir es que el proceso de registro es gratuito y puede evitar algunos quebraderos de cabeza futuros. Los datos que des y como uses el servicio es cosa tuya, amigo empresario.
Hasta este momento, cuando un empresario piensa en lanzar un producto, una empresa o un proyecto particular, se viene pensando en registrar una marca, un nombre comercial y, cada vez más, entra dentro de lo habitual el que hagamos un chequeo previo en la Web para comprobar la disponibilidad del nombre de dominio en Internet. Es más, cada vez se registran más tanto el "punto como" como el "punto es" para asegurarnos que nuestra marca no caerá en terceros ya sean de buena o mala fe.
Desde luego lo anterior es importante. Es, digamos, el punto de partida y lo más básico a la hora de asegurarnos la protección de nuestra marca y nuestra imagen (apunto: desde un punto de vista jurídico, y dejando de lado algunos matices, lo más importante es tener la marca registrada para evitarnos problemas futuros).
Ahora bien, lanzo una reflexión que creo puede tener un alto valor añadido para aquellos que se preocupan de tanto de su identidad en Internet como de la protección de su marca. Esta reflexión en voz alta puede servir, desde mi punto de vista, tanto para profesionales a la hora de aconsejar a sus clientes, como para el propio empresario que conociendo estos canales, ganará tanto en tranquilidad como en presencia.
Se trata de los servicios de la llamada Web 2.0.
Internet es conceptualmente global, y dado el camino que están tomando las cosas, cada vez es más importante la intervención del usuario en la Web: escribiendo comentarios en blogs, subiendo fotos, comentando vídeos, rellenando encuestas, reservando hoteles y billetes de avión, comparando productos y precios y, como no, introduciendo su perfil en redes sociales. Pues bien, para todos estos servicios suelen ocurrir tres cosas: (i) son gratuitos -al menos en sus versiones básicas-; (ii) para participar activamente suele necesitarse de un nombre de usuario y de una clave; y (iii) en muchas de las webs de las llamadas 2.0 cada usuario tiene un perfil asignado al nombre de usuario con el que se ha registrado. El único requisito para introducir un nombre de usuario a la hora de registrarse en un servicio es que ese nombre esté disponible. Nada más.
Por lo tanto, más adelante veremos algunos ejemplos, pero la conclusión es que INTERESA DARSE DE ALTA EN CUANTOS MÁS SERVICIOS WEB 2.0 MEJOR PARA ASEGURARNOS QUE NO SE SUPLANTARÁ NUESTRA IDENTIDAD Y QUE, ADEMÁS, LOS TENDREMOS DISPONIBLES SI ALGUNA VEZ REALMENTE QUEREMOS USARLOS.
Para tratar de explicarlo mejor, creo que lo ideal es verlo sobre algunos ejemplos con los servicios más habituales y representativos:
1) BLOGS.
El lector da por hecho que el blog que ahora está leyendo es de AJE REGIÓN DE MURCIA, pero...¿y si no lo fuera?. En realidad ha bastado con tener una cuenta en Blogger y crear un Blog con un nombre determinado. Empresario, piensa en que mañana puedes ver en la web una nueva página llamada http://elnombredetuempresa.blogspot.com y que bien pueden descalificar tu producto, bien pueden aprovecharse de tu buena imagen para crear confusión. ¿Qué cuesta crear un blog con el nombre de la empresa de forma que, aunque no esté operativo, NADIE MÁS PUEDA REGISTRARLO en adelante? Respuesta: NADA.
2) CUENTAS DE EMAIL.
Es también cada vez más habitual el uso de las cuentas de mail facilitadas por Gmail de Google o el correo de Yahoo. Es más, estas cuentas son cada vez más utilizadas para acceder a ciertas páginas o servicios de las propias compañías. Si tu empresa (no ya la persona física) quiere aprovecharse de las ventajas de este tipo de correo además del corporativo -aunque ahora mismo pueden ser en realidad el mismo ya que una cuenta de Gmail puede operar bajo el nombre de dominio que le indiquemos- ¿por qué no registrar un correo de Gmail, Hotmail o Yahoo con el nombre de la empresa? Amigo mío, intenta registrar el nombre de tu empresa en un correo de Gmail y cuentanos que ocurre. Probablemente YA ESTARÁ COGIDO!. De nuevo lo ideal (y gratuito) es reservarnos también estas cuentas de correo.
3) COLOFÓN FINAL: LAS REDES SOCIALES.
Las redes sociales son el paradigma de la falta de escrupulosidad, en la mayoría de las veces por parte del propio usuario, hacia el respeto por la protección de datos personales o la propia intimidad. No le niego sus virtudes. Al contrario, personalmente tengo usuario en varias de ellas y creo que en un futuro no muy lejano serán uno de los medios principales de contacto entre las personas y las empresas.
Por todo ello, no lo dudes: aunque hoy no quieras usarlas REGISTRA TU USUARIO, tanto personal como de la empresa, ya que te arriesgas a que alguien a quien probablemente no conoces (o sí), lo haga por ti. En ese caso piensa en qué ocurriría cuando un posible cliente buscando información sobre tu empresa en Internet se vea directamente dirigido a una página en Facebook en la que el usuario es tu marca o tu empresa. Esa página no tiene precio para ti, sin embargo, si la registras ahora, será GRATIS.
CONCLUSIÓN: mi opinión es que, si quieres controlar un poco más tu marca o tu identidad en Internet (tampoco se le pueden poner puertas al campo, ojo), no dudes en registrarte en, al menos, los siguientes servicios con el nombre de tu empresa (si lo haces con el tuyo también mejor que mejor):
- Crea una cuenta en Google (te servirá para iGoogle, Google Reader, Blogger, Gmail, y un sin fin de servicios de Google).
- Crea un Blog en Blogger con el nombre de tu empresa (puedes incluso escoger la opción de que no sea visible con lo que ni siquiera aparecerá en las búsquedas, pero al menos te aseguras que nadie más podrá registrarlo).
- Da de alta un usuario en Skype.
- Sepas o no sepas lo que es Twittear (creeme, lo acabarás sabiendo), ábrete un usuario en Twitter. Intenta buscar entre los usuarios de Twitter cualquier marca conocida o nombre de famoso. Verás que ya están ahí.
- Crea un usuario en las dos o tres redes sociales más usadas: Xing, LikedIn y Facebook. Las dos primeras son de tipo más profesional, mientras que la tercera es algo más personal aunque tiene muchísimo tirón y se pueden crear páginas para empresas.
- Esto en realidad no tiene fin, de modo que, al margen de lo anterior hay también otras páginas y servicios que quizás quieras revisar por si te interesa tener usuario o crear contenido con el nombre de tu empresa. Aparecen cientos a diario, pero las que listamos a continuación son de las ya consolidadadas (si es que se puede decir eso en Internet): Flickr, MySpace, YouTube, Slide-Share, LastFM, Wikipedia, Delicious, ...
DISCLAIMER: tus datos son tuyos. Esta entrada no es una apología de "expón tus datos libremente en Internet", ni mucho menos. Lo que quiero únicamente decir es que el proceso de registro es gratuito y puede evitar algunos quebraderos de cabeza futuros. Los datos que des y como uses el servicio es cosa tuya, amigo empresario.